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Las lluvias y el granizo han pasado factura en la Comarca del Noroeste. El pedrisco ha causado daños en el albaricoque, en los cítricos o en la almendra.
A la pérdida del fruto se le suman los destrozos que el granizo ha causado en la madera de los árboles perdiendo así la producción de los años siguientes. Los agricultores afirman que es un daño que llevan arrastrando desde principios de año, cuando las primeras lluvias afectaron a la floración y luego las heladas.
El granizo y las precipitaciones de estos últimos días han hecho que se pierda casi el 100% de la producción aquí en el Noroeste, se trata de pérdidas millonarias. Un daño que afecta directamente al fruto o a la totalidad del árbol por la Monilla, un hongo que se desarrolla por la humedad de las lluvias y que afecta a los frutales de hueso.
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