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De apenas 400 habitantes y dividida entre el término municipal de Cehegín y Calasparra, sufrío ayer a mediodía una tremenda granizada. En concreto, la peor parte, la recibió la carretera que da acceso a la población (Cañada Valenciana). Tanto la agricultura: almendro, olivar y albaricoque como las empresas de cerámica de la zona han sufrido las consecuencias. Unas que dejan ya pérdidas de miles de euros y el trabajo de mínimo un mes tirado a la basura en dichas empresas familiares. Y es que el granizo, aunque menudo, cayó en muchísima cantidad acompañado de agua. Hasta 20mm se llegaron a registrar en tan solo media hora.
Hoy los vecinos valoran los desperfectos en el terreno y siguen mirando al cielo porque esta tarde, de nuevo, aumenta la probabilidad de más tormentas que en el interior podrían ser intensas.
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